

Rupturas y Renacimientos: Reconstruyendo el Amor Propio
Cuando una relación termina, es natural sentir que has perdido una parte de ti mismo. Pero en ese proceso de duelo y reflexión, descubres que lo que realmente has perdido no es a la otra persona, sino la oportunidad de continuar en una situación que quizás ya no te estaba ayudando a crecer. Cada ruptura te ofrece una lección sobre ti mismo y sobre lo que necesitas y mereces. Este es el momento en el que aprendes a valorarte más. A través del dolor, te das cuenta de que tu valor no depende de cómo te vean los demás, sino de cómo te ves a ti mismo. La fuerza surge cuando te levantas después de cada caída, cuando reconoces que aunque una etapa de tu vida ha terminado, tú no has terminado. Te descubres más fuerte, más consciente de lo que quieres y, sobre todo, de lo que no estás dispuesto a aceptar. Es en ese proceso que comienzas a construir una relación más sólida contigo mismo, lo cual es la base para cualquier futuro amor sano.
Anuncios