Escogió mi Corazón un Amor Equivocado.
Escogió mi corazón un amor equivocado, uno que bailaba al ritmo de tambores y quenas, envuelto en el calor de la tierra colombiana. En cada acorde, se tejían promesas bajo cielos de café y montañas de volcán, donde la brisa del Pacífico traía el susurro de sueños compartidos. Pero a veces, el amor llega disfrazado de ilusiones, como la mariposa que sigue al viento sin rumbo fijo. Entre notas de bambuco y San juanitos, descubrí que, aunque mis latidos buscaban sincronía con los suyos, el eco de lo distante resonaba más fuerte que cualquier melodía. En esa tierra de pasión desbordada, aprendí que, aunque el corazón lata fuerte, no todos los amores tienen buena suerte.
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